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En un partido que se le puso cuesta arriba desde el inicio, Wilstermann cayó ayer por 4-0 ante Vasco da Gama en el estadio Sâo Januário de Río de Janeiro por la ida de la fase 3 de la Copa Libertadores.
El cuadro aviador se presentó en territorio carioca con dos modificaciones inesperadas: Ronny Montero ocupó el lateral derecho y Alejandro Meleán se ubicó en el mediocampo, dejando a Jorge Ortiz y Cristian el Pochi Chávez en el banco de suplentes.
El equipo local, que venía de marcar seis goles en la ronda anterior contra Universidad de Concepción de Chile, apretó al Hércules desde el primer minuto y lo puso contra las cuerdas.
Producto de esa presión, llegó el primer gol de la noche a los 18 minutos, a través de Paulao que batió la resistencia del golero Arnaldo Giménez (1-0).
El arquero paraguayo realizó varias intervenciones que evitaron que el Almirante aumentara la brecha. Sin embargo, sobre el filo del primer tiempo, Giménez cometió un error que le salió caro.
Corrían los 41 minutos y el guardameta dudó ante una pelota aérea que rebotó y, mientras Edward Zenteno y Álex Silva pedían un fuera de juego, Paulinho introdujo el balón en las mallas del pórtico valluno y puso el 2-0 e irse a los vestuarios con ventaja.
En la segunda parte, ingresó el Pochi en filas rojas. El volante argentino cambió la fisonomía de juego y Wilster sostuvo más tiempo el balón, generando incluso llegadas de riesgo sobre el arco defendido por el uruguayo Martín Silva.
La contundencia fue otra diferencia a favor del equipo local que no se desesperó por ampliar la ventaja. Cerca del final del partido, el elenco dirigido por Zé Ricardo encontró el premio a su paciencia.
Yago Pikachu, que anotó su cuarto tanto del año con el Vasco y el tercero en la Copa, marcó el 3-0 a los 88 minutos del cotejo.
El Rojo buscaba desesperadamente marcar el ansiado tanto de visitante pero, en contrapartida, sufrió la estocada rival a los 4 minutos del tiempo añadido. Rildo, quien también había cerrado cifras en Chile, metió el cabezazo goleador para el 4-0 definitivo.
Las apuestas del DT aviador naufragan en su visita al equipo almirante en Río de Janeiro
Contra varios pronósticos, Ronny Montero jugó ayer en el lateral derecho de la retaguardia roja. El defensor cruceño disputó su segundo partido del año después de haber acompañado a David Díaz en la zaga central en el compromiso liguero del lunes 5 de febrero ante Destroyers en Sacaba.
Alejandro Meleán, que venía jugando en ese costado, pasó a desempeñarse en el medio sector para apoyar a Cristhian Machado y Fernando el Menona Saucedo. El jugador de mayor dominio de balón en el Aviador, Cristian Chávez, miró los primeros 45 minutos desde el banco de suplentes.
Prueba de que la idea inicial no salió dentro de los parámetros esperados, fue que apenas inició el segundo tiempo, el director técnico Álvaro Peña dispuso el ingreso de Chávez en lugar de Montero. Luego, el estratega intentó cambiar la historia colocando a Díaz por Álex Silva en defensa y sumando un atacante al poner a Gilbert Álvarez por Marcelo Bergese.
Si bien el equipo logró hilvanar un mayor volumen de juego en la etapa complementaria y generó jugadas ofensivas, no logró concretarlas y terminó sufriendo una goleada que lo deja al borde de quedar al margen.
13 goles
En sus últimas tres salidas por Copa Libertadores, la escuadra valluna recibió demasiados tantos: 8 ante River, 1 contra Oriente y los 4 de ayer.