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David Paniagua, ejecutivo de Futbolistas Agremiados de Bolivia (FABOL), insistió que los directivos de los 14 clubes profesionales deben pagar las planillas hasta el mes de febrero y después reiniciarán las negociaciones y lamentó que la Federación Boliviana de Fútbol mediante declaraciones de los directivos esté «desprestigiando» a la entidad que agrupa a los deportistas en el país.
«Estamos a la espera de que los dirigentes puedan cumplir el pago de los sueldos de febrero, es un pedido clamoroso que hacen todos los capitanes de los clubes; además los dirigentes hicieron un compromiso de ponerse al día, no tiene sentido seguir hablando de eso si ellos no pagan de ese mes, no hay porque esperar porque en ese mes hubo normalidad», dijo Paniagua.
El representante de los jugadores lamentó que los directivos busquen «otros» caminos para llegar a un acuerdo con los jugadores con el tema de los sueldos, «la FBF quiere sacarnos de la ronda de juego y negociar directamente con los futbolistas, los reclamos aparecen justo cuando la Federación inicia una campaña de desprestigio con denuncias de manejos de dineros que realizó FABOL, para ellos poder negociar directamente con los jugadores», acotó.
Sobre este panorama, el vicepresidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Robert Blanco, explicó que realizarán un informe al Comité Ejecutivo de la entidad con respecto a las negociaciones con FABOL, además de aclarar que no se reunirán con el representante de los futbolistas ya que mantiene una posición «radical».
Sin embargo, algunos presidentes se acercaron a los capitanes para iniciar conversaciones directamente con los jugadores para hacerles conocer «la realidad de cada institución».
El titular de Wilstermann, Gróver Vargas, informó que tuvo conversaciones con su capitán Edward Zenteno para que pueda ser parte de las reuniones con los dirigentes de su agremiación y sepa la situación de los clubes.
Mientras, la presidenta de The Strongest, Inés Quispe, explicó que conversó con algunos jugadores y dijo que «están abiertos para
negociar», pero es FABOL «quien frena a los futbolistas». Ese mismo camino también siguieron los dirigentes en Santa Cruz y Potosí.