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Debido a la crisis institucional, financiera y deportiva que vive el Aviador, la Confederación Mundial de Filiales de Wilstermann se declaró en emergencia y solicitó formalmente una asamblea extraordinaria con el objetivo de que Gary Soria, titular de la institución, rinda cuentas sobre la situación y el futuro del establecimiento.
Mediante un comunicado, la Confederación hizo pública su postura: «Repudio total y absoluto al pésimo manejo dirigencial, administrativo, legal y deportivo», se lee en un fragmento. A su vez, arremete contra Soria.
Las filiales consideran que existiría una falta de compromisos asumidos antes y después de su candidatura a la presidencia del club. Asimismo, acusaron al director jurídico del Hércules, Víctor Hugo Pérez, de «amenazar, insultar y faltar el respeto al club cochabambino», ante el silencio de Soria y toda su dirigencia.
De igual manera, en caso de que Gary no se encuentre a la «altura» de la situación, sugieren que dé un paso al costado de manera inmediata para no convertirse en el artífice principal de la desaparición de club, algo que sostienen nunca «perdonarían».
En el comunicado la Confederación aclara que su organización no se sumará a actividad o iniciativa alguna ya sea institucional o económica mientras la actual directiva siga en funciones debido a la falta de transparencia y propuesta que observan en el directorio, para sacar al equipo de la creciente crisis.