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Días atrás la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) aprobó el calendario del Campeonato Brasileño de la serie «A», que comenzará el 8 de agosto con un mes apretado y que permitirá a los clubes retomar la Libertadores con más minutos de juego en relación a los bolivianos.
Por el grupo B de la Libertadores, Bolívar recibirá a Palmeiras en el estadio Hernando Siles, escenario al cual llegará con un mínimo de 10 encuentros del torneo de la Serie A de Brasil. El calendario será el mismo para Atlético Paranaense, rival de Wilstermann, en el estadio Félix Capriles, por la zona C del certamen continental.
Esta es la agenda de Palmeiras: Vasco de Gama 8 de agosto, Fluminense el 12, Goiás el 15, Atlético Paranaense el 19, Santos el 22, Bahía el 29 , Internacional el 2 de septiembre, Bragantino el 5, Corinthians el 9 y Recife el 12.
Las fechas serán las mismas para los compromisos de Atlético Paranaense y jugará frente a: Fortaleza, Goiás, Santos, Palmeiras, Fluminense, Atlético Mineiro, Bragantino, Vasco da Gama, Botafogo y Coritiba.
La Libertadores prevé reanudarse el 15 de septiembre con la tercera fecha en la cual a los campeones bolivianos de 2019 les tocará medir fuerzas contra los brasileños. Palmeiras llegará como puntero de su grupo con seis puntos frente a los tres que tiene la Academia y Atlético Paranaense tiene tres, igual que el Imperio Escarlata.
Los escenarios deportivos para los encuentros de la Serie A están por definirse, de acuerdo al permiso que obtengan los clubes de las autoridades regionales de salud y el cumplimiento con los protocolos de bioseguridad.
Los entrenamientos en el vecino país se intensificaron desde junio por la disputa de los cotejos estaduales. Palmeiras y Atlético Paranaense también tienen de por medio la Copa Brasil, los dos esperan por conocer a los rivales que saldrán de la tercera fase.
El Rojo y el Celeste esperan el permiso de las autoridades gubernamentales para regresar a los entrenamientos grupales en el campo abierto. Los protocolos de bioseguridad de estos planteles fueron aprobados por la Sociedad Boliviana de Medicina del Deporte y sólo resta el visto bueno del Ministerio de Salud.