¡Hola a todos! Queremos recordarles que para seguir manteniendo esta página, contamos con el apoyo de nuestros patrocinadores. Si les interesa alguno de los productos o servicios que ofrecen, les agradeceríamos que visiten sus sitios web a través de los enlaces que tenemos disponibles en nuestra página. ¡Muchas gracias por su apoyo!
Wilstermann tiene la obligación de conseguir una victoria ante Peñarol uruguayo para rehacer su camino a los octavos de final de la Copa Libertadores. Esta tarde (18.00), en el estadio Félix Capriles, pone en juego gran parte de su clasificación.
Los Rojos llegarán al compromiso tras caer ante el Atlético Paranaense (2-3), luego del parón de seis meses por la pandemia; mientras que el Carbonero podría sacar ventaja con los más de 10 fechas oficiales en su país.
El entrenador Cristian Díaz no contará con el brasileño Serginho, expulsado en el duelo ante el Paranaense, al que podría reemplazar el volante cochabambino Didí Torrico.
“Es una ausencia muy sentida para este partido, pero el técnico ya vio la variante”, declaró Gróver Vargas, titular de Wilster.
Un empate o una derrota, prácticamente dejaría sin opciones de acceder a los octavos, y reducidas opciones de pasar a la Copa Sudamericana.
“Lucharemos hasta el último minuto y en los dos partidos como visitante para conseguir puntos que nos permita terminar entre los líderes de la serie”.
Los dirigidos por Mario Saralegui tienen también la presión de arrancar al menos un empate en su presentación en el estadio Félix Capriles, para seguir con vida en la competición continental.
Justamente, parte de esa motivación del Peñarol está en la última victoria que consiguieron en el torneo local como visitante ante Plaza Colonia 1-3 y que le sirve para esperar con optimismo el duelo ante el Wilstermann.
Los Carboneros llegaron ayer a Santa Cruz en un vuelo chárter y pasaron la noche en un céntrico hotel. Hoy pasado el medio día se trasladan a la Llajta (14:30) y del avión se trasladarán directamente al estadio Capriles.
PARANAENSE
Atlético Paranaense conquistó ayer un reconfortante triunfo sobre Colo Colo (2-0), en el estadio Estadio Arena da Baixada, y pone un pie en los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
El cuadro brasileño fue “devastador” en la primera etapa ante un Cacique no pudo hacer pie en el terreno de juego de pasto sintético.
El Furacao acumuló nueve unidades y deja al plantel chileno en la segunda casilla con seis. El panorama en el grupo “C” quedará clarificado tras el encuentro que disputarán hoy (18:00) entre Wilstermann con Peñarol, quienes tienen tres puntos.
A los 7 minutos, se abrió el marcador para el local con un tanto en contra de Felipe Campos, quien en su propósito de despejar la pelota la envió al fondo de las redes, tras un servicio de esquina del Furacao.
Siete minutos después (14), amplió la cuenta Gabriel Suazo, quien aprovechó una distracción de la defensa visitante (2-0).
Tras el gol, el plantel brasileño bajó las cargas y controló la pelota y generó pocas ocasiones de gol.
En el complemento, Colo Colo intentó descontar en el marcador, pero no tuvo los argumentos necesarios para romper la zaga de los brasileños.
Los minutos finales, ambos cuadros sintieron el desgaste físico, pero el tiempo no alcanzó.